El papel de las algas en la agricultura sostenible y residuo cero
Los expertos en agronomía destacan cada vez más el papel de las algas en la agricultura sostenible. La razón es bien sencilla: el principal reto del sector agroalimentario para los próximos años pasa por bioestimular los cultivos agrícolas con productos naturales. Y ahí es donde las algas, como sustancias que nos proporciona la misma naturaleza, muestran su efectividad. Logran aumentar la productividad agrícola, garantizar la seguridad alimentaria y llevar a cabo una agricultura sostenible medioambientalmente.
Las algas -tanto microalgas como macroalgas- son organismos con una larga vida en nuestro planeta y un papel decisivo en la formación de la vida. Al fin y al cabo, gracias a la fotosíntesis de las algas fue posible la creación de la atmósfera. Por eso, su capacidad de bioestimulación, de estimular las funciones vitales, también resulta provechosa en la agricultura. Desde la biotecnología, estudiamos y optimizamos la aplicación de las algas en la agricultura residuo cero, por sus evidentes potencialidades en una agricultura sostenible como la que ahora, más que nunca, necesita el planeta.
Las algas como bioestimulantes agrícolas
Y es que las algas, como las que forman parte de la composición de los nuevos bioestimulantes agrícolas, permiten un desarrollo vegetativo óptimo. Precisamente lo que necesitan los agricultores para sus campos. Los bioestimulantes agrícolas son un complemento específico perfecto para los cultivos basados en la auténtica filosofía Residuo Cero. ¿Por qué? Porque gracias a sus muchos componentes favorecen el vigor de los cultivos. Entre otras cosas, tienen:
- Un elevado contenido en fibra.
- Macro y micronutrientes.
- Aminoácidos.
- Vitaminas.
- Y fitohormonas naturales.
Las aplicaciones agrícolas de las algas
Por todo ello, las algas cumplen funciones tan distintas como mejorar las condiciones del suelo, y contribuir con ello a la retención de la humedad, o ser un potente bioestimulante, gracias a su alto contenido en minerales y a ser una indudable fuente de oligoelementos. Dicho todo esto, resulta evidente el importante papel que tienen y pueden llegar a tener las algas en la agricultura sostenible, en la agricultura residuo cero. Y por esa razón son fundamentales en la composición de nuestra línea de bioestimulantes.
Las algas marinas, y sus aplicaciones y beneficios, se conocen desde hace muchísimo tiempo. Pero entre las que están teniendo mayor rendimiento en el sector agrícola destacan las llamadas algas Ascophyllum nodosum (como la que aparece en la foto, del autor Ar rouz con licencia CC BY-SA). Las algas Ascophyllum nodosum se caracterizan por sufrir un mayor estrés que el resto de las algas, al alternar periodos de vida sumergidas en agua y al aire libre. La consecuencia es que su organismo, para sobrevivir de la mejor manera, genera un alto contenido en agentes bioactivos que resultan muy útiles para su uso en agricultura.
Greencal
Greencal
Greencal es una crema formulada a partir de un extracto puro de algas con calcio, diseñado para reforzar las paredes celulares, mejorando la firmeza y vida útil del fruto. Mediante bajas temperaturas y ruptura de células, se extraen los componentes activos presentes en el alga Ascophyllum nodosum (alginatos, manitoles, polisacáridos y polifenoles).
Optimar
Optimar
Optimar es un bioactivador formulado a base de extractos naturales procedentes de algas marinas (Ascophyllum nodosum). Su fórmula exclusiva a partir de una combinación de ácidos (algínico, fólico y glucónico) forman un suero que favorece y reactiva la división y elongación celular.
Como vemos con el ejemplo de las algas, la naturaleza suele dar respuestas a nuestras necesidades. Y en el campo, en la agricultura, más si cabe.